martes, 23 de agosto de 2011

Yo fuí como el mar alguna vez...

14 de noviembre de 2006
En realidad tu nombre nunca ha sido de mis favoritos. Tiene algo de aridez, son de la clase de asuntos de vida que no alcanza a paladear mi alma. Pero llamo "arida" a quien está inundada.
Descubriéndote de a poco me has sorprendido. Como el mar ofende a la Tierra, tú me has ofendido a mí. Cuando he creído que en Tierra existen pocas cosas por descubrir, volteo al mar, observo su paz majestuosa y sé que en su interior hay terrores y maravillas, y el mar ofende a la Tierra, con el rostro de frente y los ojos fijos en ésta, diciendo: "¡no sabes nada!": Y así inundado de ti, me (des)cubres, aunque no lo (des) cubras todo.
Y que puedo decir del derroche de fuerzas que hemos tenido. Sólo ahora sé que he estado en el equívoco, creyendo que eres metódica y pensante; cuando todo el tiempo has demostrado que solo sientes. Cada momento se ha hundido en tus aguas, cada momento se ha incorporado en ti.
Gracias y celebro la vida que se te ha otorgado, feliz aniversario de vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario